Niño Interior.
Hoy quiero proponerte este lindo ejercicio.
Si te es posible, ve y busca una foto de tu niñez.
Mírala y tómate el tiempo para pensar en ese niño o esa niña.
Es normal si sientes nostalgia.
Lo que quiero que hagas, es que le hables como si lo estuvieras conociendo.
Cuéntale que hoy, tú eres la persona que le está permitiendo cumplir esos sueños que tenía en la época de esa foto.
Si la vida ha dado giros inesperados, hazle saber a esa personita, que han salido adelante, que han llegado juntos hasta aquí y van por más.
¿Sabes algo?
A veces nos olvidamos de la persona más inocente que podamos conocer… nuestro propio niño interior.
Recuérdalo constantemente, así haya episodios no tan alegres.
Recuerda su alegría, las sonrisas, los juegos y la forma como se divertía.
Ese niño o niña, quiere verte cruzar la meta, levantar el trofeo… quiere celebrar contigo cuando digas “¡Lo Logré!”.
Permítele sentirse orgulloso u orgullosa de ti.
Posdata: ¿Sabías que en Medellín haré una meditación dedicada reconfortar nuestro niño interior? Será un ejercicio más detallado y profundo que este que acabamos de hacer.
Asiste ingresando a este enlace.
Te mando un abrazo doble… uno para ti y otro para ese niño o niña maravilloso que llevas dentro.
Margarita Pasos.